Entre 1777 y 1783 embarcaron para Luisiana 4.312 isleños canarios, de los cuales arribarán definitivamente a ese territorio norteamericano sobre los 2.500. Los inmigrantes canarios no solo intervinieron en la defensa de Luisiana y en la creación de asentamientos, sino que, como soldados de su regimiento, se involucraron en las batallas emprendidas por Bernardo de Gálvez en la Florida occidental británica en apoyo a los revolucionaros norteamericanos.